Yo
no diré adiós.
Las marchas son bellas
no precisan dramas
ni florituras.
La marcha es un derecho
no precisa aviso
ni permiso.
II
No llames a la puerta
cuando salgas
no pidas permiso
para huir de tu casa.
Solo tu barca espera la huida.
Tus razones se irán
contigo.
III
Y no me preocupa el límite
para el exilio de mi cáscara
blanca y pesada.
No me importa cuando seas
cuando nazcas
en mi desdibujamiento
pero si
que la mujer de hueso nos vea
desde su bóveda
de terciopelo negro.
no diré adiós.
Las marchas son bellas
no precisan dramas
ni florituras.
La marcha es un derecho
no precisa aviso
ni permiso.
II
No llames a la puerta
cuando salgas
no pidas permiso
para huir de tu casa.
Solo tu barca espera la huida.
Tus razones se irán
contigo.
III
Y no me preocupa el límite
para el exilio de mi cáscara
blanca y pesada.
No me importa cuando seas
cuando nazcas
en mi desdibujamiento
pero si
que la mujer de hueso nos vea
desde su bóveda
de terciopelo negro.